La gestión del color es el proceso para garantizar que los colores son coherentes, precisos y repetibles en todo el flujo de trabajo fotográfico. Históricamente se ha considerado como un proceso complejo y largo. Teniendo en cuenta los avances tecnológicos sobre el ajuste del color, la posibilidad de capturar y representar colores reales y naturales hoy en día está al alcance de todos nosotros.
Entonces ¿por qué tenemos que seguir preocupándonos de la gestión del color o de calibrar los monitores?
- Cada monitor muestra los colores de manera diferente. Incluso dos monitores de la misma marca y modelo presentan diferencias y sus colores aun variaran más con el tiempo.
- No se puede confiar en nuestros ojos. Factores tales como la fatiga y la hora del día afectan la forma en que ven nuestros ojos el color.
- Los colores de la imagen no son fieles a la realidad. A menudo, las fotos no muestran bien los tonos de piel y aparecen como apagados, los blancos no son puros, y los azules se ven cían.
- Si el monitor no muestra los verdaderos colores de tu foto, los ajustes de posprocesado serán un desperdicio innecesario de tiempo en edición.
- Las imágenes impresas no se corresponden con los colores en el monitor. Con un monitor sin calibrar, los colores de las fotografías impresas no coincidirán con lo que se ve en la pantalla.
Todas estas diferencias se irán sumando a lo largo del flujo de trabajo, dando lugar a un color incontrolado e inadecuado que puede consumirnos mucho tiempo y frustramos cunado intentamos corregirlo en postproducción.
Para los profesionales, los beneficios de la calibración del color son significativos. Además del control real de las imágenes resultantes, la gestión de color ahorrará mucho tiempo y recursos en los procesos de edición en todo el flujo de trabajo y evitará las perdidas de tiempo y económicas que suponen hacerlo mediante el ensayo y error. Una vez que todos los dispositivos de la cadena de imagen están calibrados, podéis estar seguros de que los colores que visualicéis en la pantalla coincidirán exactamente con los de las pruebas y con los de las impresiones finales.
Para conseguir un color preciso, debemos tomar algunas medidas sencillas en los dispositivos que utilizamos en todo el flujo de trabajo para tenerlos debidamente calibrados y asegurar la calidad del color en todo el proceso.
Calibrar la cámara
Cada marca de cámaras, modelo y sensor, incluso si utilizamos diferentes objetivos en una misma cámara, tendrán variaciones de color. Cada combinación puede fotografiar la misma escena con diferentes interpretaciones de matiz, saturación y brillo. Si se utilizan varias cámaras en la misma sesión fotográfica, se aprecia a simple vista que cada una puede producir diferentes interpretaciones de color.
Para evitar estas inconsistencias, existen herramientas asequibles en el mercado que nos permiten calibrar rápidamente nuestras cámaras usando cartas de color calibradas y un software para crear las correcciones que podremos aplicar a las imágenes durante el proceso de importación RAW. Los beneficios de calibrar las cámaras, son imágenes que no sólo serán más precisas respecto al color original, sino que también obtendremos más consistencia entre las cámaras y reduciremos los ajustes manuales en la postproducción, haciendo todo el proceso más rápido y más fácil.
Calibrar los monitores del ordenador
Tu monitor es una herramienta en la que necesitas poder confiar. Si los colores del monitor no son exactos, no podrás ver los colores reales de la escena, ni los detalles de luces y sombras, por no hablar de los tonos de piel correctos. Y si estás viendo que las imágenes no coinciden con la realidad, ¿cómo puedes editarlas de forma adecuada o revisarlas en tu pantalla para que coincidan con tus impresiones?. Simplemente, no se puede.
En el artículo Cómo calibrar tu monitor vimos diferentes maneras de calibrarlo, paro os recomiendo que utilicéis el colorímetro i1Display Pro de X-Rite o el Spyder4Elite de Datacolor con los que podréis calibrar vuestros monitores en tan solo unos minutos. Alguno de los colorímetros permiten perfilar proyectores de mesa y la medición de la luz ambiente,
Calibrar los monitores asegura que los colores serán precisos antes de editar o imprimir. Con el fin de asegurarte que las imágenes se mostraran de la forma que pretendes, el monitor debe ser calibrado. La calibración de los monitores asegura que lo que ves es lo que obtienes.
Perfiles de impresora
Los perfiles de impresora garantizan que las copias impresas finales muestren un color preciso y coincidente con el de las cámaras y monitores calibrados.
Es necesario seleccionar el perfil de impresión para cada tipo de papel que utilicemos y aplicarlo ya que cada papel absorbe y refleja el color de manera diferente. Los diferentes perfiles se asocian entonces a cada tipo papel como el mate arte fino, papel fotográfico brillante, u otros tipos de papel. Lo perfiles de impresora adecuados eliminan perdida de tiempo y los gastos de hacer ajustes mediante ensayo y error que de otro modo haremos durante la impresión de imágenes.
Hay sistemas que nos permiten generar los perfiles para nuestra impresora, tinta y para cada tipo de papel que usemos en nuestras impresiones como es el SpyderPRINT. Ahora bien, los fabricantes de papel fotográfico generan los perfiles adecuados para cada uno de sus papeles y para muchos de los fabricantes y modelos de impresoras. Estos perfiles suelen estar disponibles en sus páginas web, que puedo decir por experiencia que funcionan perfectamente dando unos resultados muy precisos. Como ejemplo, podéis descargar los perfiles para los papeles fotográficos de la firma Ilford en su web.
Conclusión
Desde la captura con la cámara fotográfica, hasta la edición y la impresión final, la gestión del color es una parte vital de todo el flujo de trabajo. La capacidad de capturar, editar e imprimir controlando con precisión y por completo el color, mostrando en el monitor los colores reales, y obteniendo impresiones perfectos cada vez.
Siguiendo estos tres pasos de calibración y repitiéndolos de vez en cuando para mantener en el tiempo la coherencia de color entre los diferentes equipos, obtendrás con facilidad controlar el color en todo el flujo de trabajo y unos resultados espectaculares muy reales.